Se define así al control progresivo del cuerpo, comenzando desde la cabeza. Este proceso implica para el bebé el poder girarse, sentarse, gatear, ponerse de pie, caminar, correr, saltar, subir y bajar. Para desarrollar la motricidad de tu bebé te damos algunos consejos.
• Coloca a tu bebé boca abajo en una colchoneta y llámalo para ver si se arrastra hacia a ti. Si observas que no hace caso y no se arrastra, trata de estimularlo.
• Durante un par de horas al día déjalo en el suelo, así lo estarás preparando para empezar el gateo.
• Para animarlo a gatear puedes ayudarte pasándole una toquilla por su abdomen, así lo colocarás en posición de 4 patas, estimulándolo a andar.
• Consigue un gusano de natación y colócalo en el piso, en seguida, intenta que tu pequeño trate de pasar por encima de él.